Bakú, 15 de febrero, AZERTAC
Comer una cucharada de aceite de oliva en el desayuno es bueno por varias razones.
Investigadores griegos informan de que el consumo de aceite de oliva ayuda a potenciar la memoria. En concreto, su ingesta ayuda a reducir la acumulación de placas en las células cerebrales, que se asocia con el desarrollo de demencia, incluida la enfermedad de Alzheimer, informa AZERTAC con referencia a sitios web médicos.
Favorece la salud ósea. El aceite de oliva contiene muchos micronutrientes esenciales para la salud de huesos y articulaciones. Si se combina con otros alimentos ricos en ácidos grasos omega-3 en la dieta, los resultados pueden ser aún más notables - en particular, estos productos son eficaces en casos de artritis.
Reduce la inflamación. Las investigaciones sugieren que el aceite de oliva y los productos que contienen omega-3 pueden ayudar a combatir la inflamación y aportar beneficios al aliviar las afecciones inflamatorias crónicas.
Favorece una función intestinal saludable. He aquí una razón que podría animarle a comer una cucharada de aceite de oliva en el desayuno: tal hábito tiene un efecto positivo sobre el peristaltismo intestinal y protege contra el estreñimiento. Además, las personas que consumen regularmente aceite de oliva rara vez experimentan problemas como hinchazón o inflamación causada por la congestión intestinal.
Mejora el aspecto de la piel. No es casualidad que muchas cremas para la piel contengan aceite de oliva: sus propiedades antibacterianas y antiinflamatorias pueden utilizarse con éxito contra la hinchazón, el enrojecimiento y las arrugas de la piel.
El consumo constante de este producto cada mañana favorece la salud y mejora el aspecto general de la piel gracias a sus efectos positivos sobre el tracto digestivo y la prevención del estreñimiento.