Bakú, 12 de abril, AZERTAC

AZERTAC presenta una entrevista con el politólogo ruso Serguéi Markov.

- La reunión de Nikol Pashinián con el secretario de Estado de EE.UU. y la presidenta de la Comisión Europea, que fue exagerada por la parte armenia y causó una amplia resonancia en los medios de comunicación azerbaiyanos, rusos y turcos, se ha producido. ¿Puede considerarse que Armenia se ha vendido a Occidente?

- La reunión de los dirigentes armenios con los líderes de Estados Unidos y la Unión Europea se desarrolló a varios niveles. A nivel de declaraciones, fue excelente: se lanzaron literalmente elogios mutuamente. Sin embargo, a nivel de decisiones políticas concretas, podemos decir que la reunión fracasó. Después de todo, hubo previsiones, y una declaración de los líderes de EEUU y la Unión Europea de que Occidente se convertiría en garante de la seguridad de Armenia, se prepararía un cierto documento marco, pero no se hizo ninguna declaración sobre las garantías de la seguridad de Armenia. También se suponía que se presentaría la idea de concluir un alto el fuego en lugar de un tratado de paz, que, por supuesto, sólo favorece a Armenia. Esto tampoco se hizo. Así pues, no se siguieron los pasos antiazerbaiyanos. Los dirigentes de EEUU y la UE se sintieron asustados por las firmes y duras declaraciones de los dirigentes azerbaiyanos. Hubo llamadas de Washington y Bruselas a Bakú al presidente de Azerbaiyán, y éste adoptó una posición tan categórica que EE.UU. y la Unión Europea dudaron en ir más allá. Y no prometieron nada especial a Armenia públicamente.

- Todo el mundo conoce los peligros de las promesas de Occidente. No hace falta ir muy lejos para encontrar ejemplos. En su opinión, ¿las aspiraciones prooccidentales de Armenia conducirán a una escalada de la situación en la región? Después de todo, incluso en vísperas de la reunión Armenia empezó a llevar tropas a la frontera condicional.....

- Occidente tiene ahora el objetivo más importante en el Cáucaso Sur, que no es establecer la paz, sino expulsar a Rusia del Cáucaso. Las grandes potencias buscan desestabilizar la situación en la región. Los viejos imperialistas depredadores están acostumbrados al principio de "divide y vencerás", manipulando diversas fuerzas e instrumentos. Cuando Occidente llegó a Corea del Sur, Alemania, Japón, estos países avanzaban hacia la prosperidad. Ahora es diferente. Occidente ha llegado a Irak, Afganistán, Ucrania, Georgia, sumergiendo a estos países en estados de caos. Allí no hay prosperidad.
Otro objetivo estratégico de la Unión Europea es crear un cinturón de regímenes políticos amigos y dependientes alrededor de la UE. La UE utilizará Armenia como ruta hacia el Cáucaso Sur para reforzar su control sobre Georgia y Armenia e intentar establecer el control sobre Azerbaiyán. Otro importante objetivo de Estados Unidos es crear un trampolín para una futura guerra contra Irán.

- ¿Creará la reunión de Pashinián con actores occidentales nuevas líneas divisorias en la región? ¿Se convertirá Occidente en un nuevo "paraguas de seguridad" para Armenia? ¿Cuál es su pronóstico sobre la evolución de las relaciones ruso-armenias?

- He mencionado los aspectos externos de la reunión de Pashinián. Pero también hay otros aspectos. Aún no está claro qué decisiones secretas tomaron las partes. Hay razones para suponer que Occidente irá poniendo obstáculos a las relaciones entre Armenia y Rusia hasta llegar a una ruptura total. Es evidente que Occidente se integrará más en la región. Integrarse a través de diversas misiones -civiles, policiales, cívico-militares, aumentando la presencia económica. Por supuesto, también les gustaría sustituir a los guardias fronterizos rusos por los suyos, asumir el control de los altos mandos del ejército armenio, donde, desde su punto de vista, hay demasiados coroneles y generales prorrusos; por supuesto, quieren reorientarlos hacia Occidente.
Así que los hechos concretos sugieren que la entrada de EEUU y la UE a través de Armenia en el Cáucaso Sur podría desestabilizar gravemente la situación.

Pero también había un tercer nivel: el de las negociaciones cerradas. Todo hace suponer que allí, en este nivel de negociaciones cerradas, se tomaron algunas decisiones. En mi opinión, un acuerdo sobre la segunda etapa de la conspiración es bastante posible.
La primera etapa de la conspiración tuvo lugar en la reunión entre Pashinián y Macron en París hace dos años, donde acordaron que Armenia se acercaría a Occidente y Occidente adoptaría una posición pararmenia.
Esa etapa ya ha pasado y ahora, además de Francia, Estados Unidos y la UE se suman a esta conspiración. Todo esto crea una situación bastante delicada. El pueblo de Armenia quiere desarrollar las relaciones entre su país y Occidente, pero al mismo tiempo se teme que, al romper relaciones con Rusia, Occidente, en términos generales, engañará a Armenia.