Bakú, 7 de mayo, AZERTAC

Las ONG azerbaiyanas han enviado una carta abierta a la directora general de la UNESCO, Audrey Azoulay, en relación con el barrio de Tepebashi.

AZERTAC presenta el texto de la carta:

«Nosotros - representantes de la sociedad civil de Azerbaiyán - dirigiéndonos a la directora general de la UNESCO Audrey Azoulay, instamos a la organización a tomar medidas para detener la destrucción del patrimonio material y cultural del pueblo azerbaiyano en la República de Armenia.

En la República de Armenia, donde históricamente residían azerbaiyanos, se aplicó una política de destrucción de todo el patrimonio perteneciente a los azerbaiyanos y se intentó borrar las huellas históricas. Hoy sólo se conserva 1 de las 269 mezquitas registradas aquí en 1870, y cientos de cementerios azerbaiyanos han sido destruidos.

El barrio de Tepebashi, en Iravan, ciudad construida y poblada antaño por azerbaiyanos, cuyo nombre histórico fue cambiado por el de «Kond», es uno de los últimos vestigios del patrimonio cultural azerbaiyano en Armenia.

Manifestamos nuestra disposición al diálogo y al compromiso con la UNESCO, dentro de las normas y mecanismos del derecho internacional, para detener la destrucción del patrimonio cultural azerbaiyano en Armenia y restaurar lo que ha sido destruido. En particular, pedimos a la UNESCO que tome bajo su protección el barrio de Tepebashi como ejemplo único del patrimonio cultural mundial. Estamos dispuestos a cooperar estrechamente con la UNESCO en las labores de supervisión.
La agresión de las autoridades armenias contra los monumentos culturales, incluido Tepebashi, contraviene el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, las convenciones sobre la protección del patrimonio mundial cultural y natural, la protección del patrimonio cultural inmaterial y la eliminación de todas las formas de discriminación racial.

La misma política de vandalismo se llevó a cabo durante la ocupación en Karabaj y Zangazur Oriental. Zonas donde antaño bullía la vida y donde se conservaban cientos de monumentos históricos y culturales han quedado convertidas en gigantescas ruinas. Lamentablemente, a pesar de los numerosos llamamientos y apelaciones durante la ocupación, la UNESCO nunca ha investigado estas cuestiones ni ha enviado una misión de investigación a estos territorios.

Invitamos a la UNESCO a enviar una misión de investigación a la República de Armenia y, con valentía, a tomar medidas urgentes sobre el barrio de Tepebashi. Estamos dispuestos a debatir estas cuestiones con los expertos de la UNESCO y a facilitarles información adicional».