Bakú, 26 de febrero, AZERTAC

El 26 de febrero a las 17:00 hora de Bakú, se guardó un minuto de silencio en todo Azerbaiyán para conmemorar a las víctimas del genocidio de Joyalí.

Como informa AZERTAC, a esta hora el movimiento de vehículos fue suspendido en las calles de la capital. Las banderas estatales de Azerbaiyán fueron arriadas en ciudades y distritos, pueblos y asentamientos del país, así como en las misiones diplomáticas del país en el extranjero.

El 26 de febrero, miles de habitantes de la capital de Azerbaiyán visitaron el monumento erigido en el distrito de Khatai a las víctimas de la tragedia, rindieron homenaje a la memoria de los mártires, depositaron coronas de flores y claveles en el monumento. En ciudades y distritos de la república, en los órganos del poder ejecutivo central y local, departamentos y organizaciones, mezquitas, iglesias, sinagogas, así como en países extranjeros se celebraron ceremonias de conmemoración, acciones, procesiones, flash mobs, actos culturales dedicados a las víctimas del genocidio de Joyalí.

En los lugares de asentamiento temporal de los habitantes de Joyalí se organizaron encuentros con testigos presenciales del genocidio y familiares de las víctimas de la tragedia. La memoria de las víctimas del genocidio de Joyalí fue honrada en las mezquitas de Shusha y Agdam, Joyalí, Khankandi y otros distritos liberados, donde ondea la majestuosa bandera de Azerbaiyán.

Cabe señalar que en la noche del 25 al 26 de febrero de 1992, formaciones armadas armenias con la ayuda del 366º regimiento de fusileros motorizados de la antigua URSS atacaron la ciudad de Joyalí y cometieron brutales masacres contra la pacífica población. Con especial crueldad, 613 habitantes de la ciudad, entre ellos 63 niños y 106 mujeres, fueron asesinados, 1275 personas cayeron prisioneras y fueron tomadas como rehenes y sometidas a torturas insoportables. Aún se desconoce el destino de 150 personas tomadas como prisioneros y rehenes. 5.379 habitantes de Joyalí fueron expulsados por la fuerza, 8 familias fueron completamente destruidas, 25 niños perdieron a sus dos padres y 130 perdieron a uno de sus padres.