Minsk, 30 de marzo, AZERTAC

El pueblo de Azerbaiyán conmemora a las víctimas del genocidio del 31 de marzo de 1918. Desde hace 103 años, los habitantes de Azerbaiyán recuerdan este día con dolor en el alma. Los impactantes hechos de las masacres, las represiones y la expulsión de la nación azerbaiyana de su tierra natal pueden considerarse como una de las páginas trágicas del siglo XX. El rastro del chovinismo armenio, que delira con la idea de crear una "gran Armenia", es claramente visible en las tierras históricas primordiales de Azerbaiyán.
AZERTAC informa que así lo afirma un artículo del embajador de Azerbaiyán en Bielorrusia, Latif Gandilov, publicado en el portal de noticias belprauda.com.
El artículo dice que un movimiento revolucionario a favor de la monarquía constitucional comenzó en Rusia a principios del siglo XX y terminó con una ola de revoluciones en todo el imperio, incluida Bakú, en 1905-1907. Aprovechando estos procesos, los armenios llevaron a cabo masacres sistemáticas y expulsiones masivas de azerbaiyanos de Bakú, Shusha, Zangazur, Ireván, Najchiván, Ordubad, Javanshir y Gazakh. Ya en 1905-1906 los armenios aniquilaron 200 pueblos azerbaiyanos en las provincias de Ireván y Ganja, y 75 pueblos en los distritos de Shusha, Jabrail y Zangazur.
Analizando a grandes rasgos lo sucedido en ese periodo, el embajador destaca en su artículo que el genocidio de azerbaiyanos en marzo de 1918 fue uno de los más sangrientos de la historia de Azerbaiyán, junto con el genocidio de Joyalí en 1992. Como vemos, los acontecimientos de 1918 y los de principios de los años 90 son muy similares y son elementos sistemáticos de una cadena, un plan bien pensado a largo plazo contra el pueblo azerbaiyano, que se ha aplicado durante los últimos 250 años.
Hablando de nuestra victoria histórica en la Guerra Patria, el embajador señala que después de otra provocación de la parte armenia, el pueblo azerbaiyano aseguró la ejecución de 4 resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y restauró su integridad territorial.