Bakú, 1 de diciembre, AZERTAC
La crisis mundial del coste de la vida está lejos de haber terminado.
Y los habitantes de las grandes ciudades son los más perjudicados. Según el índice anual del coste de la vida en el mundo, publicado por “Economist Intelligence Unit” (EIU), el coste medio de la vida aumentó un 7,4% este año. Los precios de los comestibles fueron los que más aumentaron.
Aunque es ligeramente inferior al salto del 8,1% que la misma encuesta registró en 2022, las cifras siguen siendo significativamente superiores a las "tendencias históricas".
Pero hay algunas buenas noticias. Los precios de los servicios públicos, la categoría que más aumentó en la encuesta de 2022, son los que menos inflación han registrado en esta ocasión.
Los aumentos de precios están disminuyendo su ritmo debido a la disminución de los problemas en la cadena de suministro desde que China levantó sus restricciones de Covid-19 a finales de 2022.
La ciudad-estado de Singapur y la suiza Zúrich fueron nombradas las ciudades más caras del mundo.
El ascenso de esta última, que saltó desde el sexto puesto de la lista del año pasado, se atribuyó a la fortaleza del franco suizo junto con los elevados precios de los comestibles, los enseres domésticos y el ocio. También se señalaron los costosos transportes y prendas de vestir de Singapur.
Aunque Nueva York empató con Singapur en el primer puesto el año pasado, el popular destino estadounidense, donde los precios han aumentado un 1,9% según el estudio, descendió al tercer puesto, empatando con la suiza Ginebra.
Hong Kong, el único otro destino asiático entre los 10 primeros, ocupa el quinto lugar, mientras que Los Àngeles se sitúa en el nº 6 y París es la séptima ciudad más cara del mundo.
La israelí Tel Aviv comparte el octavo puesto con la danesa Copenhague. Sin embargo, cabe señalar que la encuesta se realizó antes del estallido en octubre del conflicto entre Israel y Hamás.
Por último, San Francisco, una de las tres ciudades estadounidenses entre las 10 primeras, ocupa el 10º lugar.
Según la encuesta, la lenta recuperación tras la pandemia y la "moderada demanda de los consumidores" fueron algunos de los factores que llevaron a ciudades chinas como Pekín, que ocupaba el puesto 34 el año pasado, a descender varios puestos en la lista.
Damasco (Siria) sigue siendo la ciudad más barata del mundo. Teherán (Irán) y Trípoli (Libia) también están cerca de la cola, en los puestos 172 y 171 respectivamente.
Los costes de los servicios públicos, el servicio doméstico y el tabaco fueron los más elevados en las ciudades estadounidenses, mientras que las de Europa Occidental fueron algunas de las más caras en lo que se refiere a ocio, transporte y enseres domésticos.
Según la encuesta, los alimentos y el alcohol son los más caros en las ciudades asiáticas.
La Encuesta Mundial sobre el Coste de la Vida 2023 analizó 173 grandes ciudades, comparando más de 400 precios individuales de 200 productos y servicios. Se excluyó la ciudad venezolana de Caracas, donde los precios han subido un 450% desde 2022.