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Nuevo estudio regional arroja luz sobre las repercusiones del cambio climático en el derecho a la educación en Europa Sudoriental

Bakú, 16 de mayo, AZERTAC
Las pasadas advertencias de la comunidad científica se han convertido ahora en nuestra realidad: los efectos del cambio climático ya no son emergencias aisladas, sino que se han convertido en la nueva norma mundial. Sólo en 2021, 23,7 millones de personas se vieron desplazadas internamente debido a catástrofes relacionadas con el clima (IDMC) y estas cifras siguen aumentando cada año. Como resultado, las personas desplazadas por el clima, especialmente los grupos más vulnerables y marginados, ven comprometido su derecho a la educación por barreras directas e indirectas a la educación, según la UNESCO, informa AZERTAC.
En las últimas décadas, el sudeste de Europa ha experimentado episodios extremos de catástrofes climáticas, seguidos de aumentos masivos de la migración y la movilidad inducidos por el clima. Con el fin de orientar a los responsables políticos para garantizar que el derecho a la educación de las personas afectadas por el clima no quede sin cumplir, la UNESCO llevó a cabo estudios comparativos de casos en Bosnia y Herzegovina, la República de Moldavia y Serbia.
Basándose en estos estudios, el informe constató que los obstáculos más directos a la educación se derivan de los daños infraestructurales sufridos por las escuelas, así como del cierre de éstas a raíz de inundaciones extremas relacionadas con el cambio climático, fenómenos ambos que se producen en cada uno de los países estudiados.
Además, el informe examinó las vulnerabilidades específicas de estos países ante el cambio climático y la movilidad relacionada. La República de Moldavia, por ejemplo, está experimentando desplazamientos entre sus poblaciones agrícolas y rurales debido a las pérdidas de medios de subsistencia relacionadas con el clima. Del mismo modo, en Bosnia y Herzegovina y Serbia, hay un elevado número de desplazados internos, refugiados, solicitantes de asilo y migrantes en viviendas inestables que corren un alto riesgo de desplazamiento en el futuro a medida que las inundaciones sigan empeorando.
Aunque hay muchas políticas integrales dirigidas a los refugiados y sus necesidades, hay pocas dedicadas exclusivamente a los desplazados internos. Para mayor complicación, los desplazados por el cambio climático no se consideran desplazados internos según la legislación nacional de ninguno de los países estudiados.
Los desplazados climáticos siguen siendo políticamente invisibles en los marcos nacionales y, como resultado, las estrategias para garantizar el derecho a la educación de estos grupos son inexistentes, a pesar de las barreras muy reales.
El informe revela además que los planes de reducción y gestión del riesgo de catástrofes se centran en el impacto que la educación puede tener en la resiliencia climática, en lugar de considerar inversamente la continuidad de la educación en las respuestas posteriores a las catástrofes.
Para abordar tanto los obstáculos comunes a la educación como las especificidades nacionales, es imperativo que todas las medidas que se adopten sean intersectoriales y polifacéticas. Con este fin, el informe proporciona orientación política operativa para los responsables políticos, y la UNESCO seguirá abogando por la consecución del ODS 4, Educación de calidad para todos, en medio del cambio climático y los desplazamientos climáticos. Este informe es uno de los varios informes regionales publicados este año y contribuirá a la elaboración de un informe mundial, que se publicará a finales de 2023.

CIENCIA Y EDUCACIÓN 2023-05-16 20:17:00