Bakú, 12 de mayo, AZERTAC
Tanto la salud de nosotros como la de la Tierra dependen de las plantas. Las plantas son la fuente del oxígeno que respiramos, de gran parte de los alimentos que comemos, de las fibras que hacen nuestra ropa y de los materiales de construcción naturales. Sin embargo, cada año se pierde hasta el 40% de los cultivos alimentarios debido a plagas y enfermedades vegetales. Esto está afectando a la seguridad alimentaria y a la agricultura, la principal fuente de ingresos de las comunidades rurales vulnerables. El cambio climático y las actividades humanas también están afectando a la sanidad vegetal, alterando los ecosistemas y dañando la biodiversidad, al tiempo que crean nuevos nichos para que prosperen las plagas.
El Día Internacional de la Sanidad Vegetal es una celebración anual que tiene lugar el 12 de mayo para concienciar sobre la protección de la sanidad vegetal con el fin de mejorar la seguridad alimentaria, la distribución y el consumo. Declarado por las Naciones Unidas, este día pretende animar a las comunidades a abordar los problemas fitosanitarios y de salud de los cultivos como forma de ayudar a acabar con el hambre, reducir la pobreza, proteger la biodiversidad e impulsar el desarrollo económico. Este día es un legado del Año Internacional de la Sanidad Vegetal de la ONU, que se celebrará en 2020. Nuestra salud y la de nuestro planeta dependen de la salud de las plantas. Las plantas constituyen el 80% de los alimentos que comemos y proporcionan el 98% del oxígeno que respiramos. Sin embargo, están constantemente amenazadas por desastres naturales y provocados por el hombre, como las infestaciones de plagas, el aumento del uso de pesticidas y herbicidas, el ritmo creciente e insostenible del comercio mundial y el cambio climático. Estos problemas suponen riesgos, especialmente para las comunidades rurales vulnerables y afectadas por la pobreza, que a menudo dependen de la agricultura para subsistir.
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) fue la primera en llamar la atención del mundo sobre el Día Internacional de la Sanidad Vegetal y pidió que se invirtiera más en innovación para impulsar la seguridad alimentaria y garantizar que los alimentos que comemos se cultivan, distribuyen y consumen de forma saludable. La organización llama específicamente la atención sobre la necesidad de transformar los sistemas agrícolas de todo el mundo para que sean más eficientes, más inclusivos, más resistentes y más sostenibles.
Además de su idea, la FAO ha proyectado varias medidas clave para mejorar la sanidad vegetal mundial, como fomentar un mayor desarrollo y aplicar medidas estándar para proteger los recursos vegetales mundiales. También señala la importancia de unas prácticas comerciales seguras que reduzcan el uso de pesticidas, para mejorar la salud de las semillas, los suelos y los polinizadores. Desde el punto de vista político, se pide a los gobiernos del mundo que den prioridad a la salud de sus productos agrícolas y a la calidad sanitaria de sus procesos agrícolas, y que hagan hincapié en la necesidad de una mayor aportación científica para abordar esta cuestión. Por unanimidad, en marzo de 2022, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 12 de mayo Día Internacional de la Sanidad Vegetal para poner de relieve estas cuestiones a escala mundial. En los años siguientes, esta festividad estará marcada por diversos actos a escala mundial, regional, nacional e incluso en las explotaciones agrícolas.