Bakú, 22 de mayo, AZERTAC

“El hombre está agotando los recursos de la Tierra más rápido de lo que la naturaleza puede reponerlos. Mientras tanto, la biodiversidad disminuye a un ritmo alarmante y sin precedentes”.
El secretario general de la ONU, con motivo del Día Internacional de la Biodiversidad, hizo un llamamiento para restablecer una relación armoniosa con la naturaleza, informa AZERTAC.
"Hemos declarado efectivamente la guerra a la naturaleza", señaló António Guterres. Un millón de especies de flora y fauna están al borde de la extinción, ecosistemas enteros desaparecen ante nuestros ojos, los humedales se secan y los desiertos avanzan. Cada año perdemos 10 millones de hectáreas de bosques, los océanos se asfixian debido al plástico y a la acidificación, ya que tienen que absorber cada vez más dióxido de carbono producido por nosotros como humanos. Sin embargo, gastamos menos en proteger la naturaleza que en subvencionar las industrias que la destruyen.
"No hemos alcanzado ni uno solo de nuestros objetivos de biodiversidad acordados internacionalmente", afirma, recordando que la naturaleza es la fuente de vida que no sólo nos proporciona los recursos que necesitamos, sino que también puede ayudarnos a afrontar una serie de retos, como los relacionados con el cambio climático.
La pandemia ha puesto especialmente de relieve la estrecha relación entre el ser humano y el mundo que le rodea. Tres cuartas partes de las enfermedades infecciosas nuevas y emergentes son zoonóticas, es decir, se transmiten al ser humano desde los animales. Guterres explicó que los cambios en el uso de la tierra y la invasión por parte de los seres humanos de los hábitats tradicionales de la fauna salvaje son los principales impulsores de enfermedades infecciosas como el ébola y el COVID-19.
"Tenemos que proteger la naturaleza, restaurar los ecosistemas y luchar por la armonía con el planeta", subrayó António Guterres. - Si invertimos la pérdida de biodiversidad, podemos mejorar la salud humana, lograr un desarrollo sostenible y superar la crisis climática.
Y la clave del éxito, afirmó el jefe de la ONU, es la vida verde. "Todo el mundo, en cualquier parte del mundo, debería poder vivir de forma responsable desde el punto de vista medioambiental", está convencido el responsable de la ONU, y para ello es necesario adoptar "políticas más eficaces que fomenten la responsabilidad de los gobiernos, las empresas y los individuos".
"Si no hacemos las paces con el planeta, tendremos las de perder", concluyó el secretario general.