Bakú, 27 de febrero, AZERTAC

El diario italiano online ElectoMagazine publicó un artículo del periodista local Enrico Toselli sobre el genocidio de Joyalí titulado "29 años después de la masacre de Joyalí, los azerbaiyanos quieren justicia", informa AZERTAC.
Toselli escribió que la tragedia de Joyalí de 1992, en la que 613 azerbaiyanos, entre ellos 63 niños, 106 mujeres y 70 ancianos, fueron brutalmente asesinados en la ciudad azerbaiyana de Joyalí en la noche del 25 al 26 de febrero, se conmemora cada año, y añade que los autores del crimen siguen impunes.
Citando las declaraciones del Comité de ministros del Consejo de Europa y del Tribunal Europeo de Derechos Humanos sobre los sucesos de Joyalí, el autor subrayó que no basta con que las organizaciones internacionales condenen estos crímenes contra la humanidad, sino que es necesario castigar a los autores de esta tragedia.
Hablando de la importancia de seguir dando pasos a nivel internacional para promover la tragedia de Joyalí, el autor dijo que los órganos legislativos de diferentes países han adoptado documentos en memoria de las víctimas del genocidio de Joyalí.
El autor también subrayó que durante los 44 días (desde finales de septiembre hasta principios de noviembre de 2020) de la Guerra Patria (de Azerbaiyán para liberar sus territorios de la ocupación armenia), las Fuerzas Armadas Armenias también cometieron crímenes de guerra contra los pacíficos residentes azerbaiyanos, golpeando con misiles numerosos bienes de carácter civil, incluyendo casas, escuelas, hospitales y otras estructuras.
El artículo indica que Azerbaiyán liberó sus tierras de la ocupación durante la Guerra Patria y quiere volver a lograr la coexistencia pacífica en estos territorios, pero exige el castigo final de los responsables de la masacre de Joyalí y el pago de indemnizaciones a las familias de las víctimas.
Los días 25 y 26 de febrero de 1992, las fuerzas armadas armenias, apoyadas por el 366º regimiento de infantería de las tropas soviéticas, estacionadas en la ciudad de Khankendi (Jankandi), cometieron un acto de genocidio contra la población de la ciudad azerbaiyana de Joyalí.
En la masacre murieron 613 residentes civiles, entre ellos 63 niños, 106 mujeres y 70 ancianos, y 1.275 fueron tomadas como rehenes. La mayoría de los residentes de la ciudad no han regresado de la toma de rehenes, y su destino sigue siendo desconocido. Tras la retirada del 366º regimiento de Khankendi, el equipo militar que le pertenecía pasó principalmente a los separatistas armenios.